miércoles, 10 de mayo de 2017

Diputación de Cádiz entrega al alcalde de Jimena un inventario de caminos rurales y vías pecuarias del municipio

Nota de prensa de la Diputación  de Cádiz.
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Inventario de caminos rurales y vías pecuarias para el desarrollo del municipio
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La vicepresidenta segunda y diputada responsable del área de Desarrollo Sostenible de la Diputación de Cádiz, Maribel Peinado, ha hecho entrega al alcalde de Jimena, Francisco José Gómez Pérez, del Inventario de Caminos Públicos de Jimena de la Frontera que ha realizado la Diputación, tras el acto de presentación pública.


 El documento es resultado de una importante labor de investigación documental y de trabajo de campo. Se compone de una memoria inventario, con la descripción de cada uno de los caminos, un mapa sobre sistema de información geográfica y material documental y fotográfico. Los detalles han sido ofrecidos por el técnico de Diputación responsable del inventario, José Manuel Astillero. Un inventario que sirve de diagnóstico del estado en que se encuentran estas vías, que suman unos 320 kilómetros, y como herramienta para su aprovechamiento para el municipio, como recurso  de crecimiento medioambiental, cultural, histórico, deportivo y, por consiguiente, turístico.

 Maribel Peinado ha explicado cómo se ha originado este  trabajo, tras un contacto hace casi dos años con el Ayuntamiento de Jimena que surgió la posibilidad de que la Diputación liderara un estudio de estas características. Un compromiso que se plasma con la entrega del documento en el día de hoy. La vicepresidenta segunda ha destacado la “rigurosa investigación documental” que ha propiciado el resultado final.

El alcalde de Jimena ha explicado que esta era una petición de numerosos colectivos y agentes sociales y que ahora comienza el trabajo real del Ayuntamiento, que una vez inventariados los recursos, tiene la posibilidad de emprender proyectos a medio y largo plazo para su aprovechamiento. Francisco José Gómez Pérez ha explicado que este trabajo supone dos ventajas para el municipio: “la recuperación de patrimonio público” y una herramienta que pone en valor una serie de caminos que va a dar lugar que los podemos a explotar a través del turismo medioambiental y rural.


Este minucioso documento recoge todos los caminos públicos del término municipal y es resultado de la investigación documental de los catastros de 1898, 1956 y el  vigente; cartografías, desde mediados del siglo XVIII; descripciones de caminos de los siglos XVIII-XIX-XX y trabajo sobre el terreno para reconocer el estado actual en el que se encuentran.

 La red de caminos públicos está formada por vías pecuarias y caminos públicos. En concreto ocho  vías  pecuarias con unos cien kilómetros de longitud, que son de competencia autonómica, y 125 caminos públicos de responsabilidad municipal, que representan unos 220 kilómetros. Estos caminos públicos se dividen en interiores, que unen la localidad matriz con localidades del término municipal, como las áreas de regadío de San Pablo de Buceite o San Martín del Tesorillo, y se consideran principales, porque articulan toda la red de comunicaciones. Son 22 y suponen 92 kilómetros. También las hay intermunicipales: en concreto, quince que representan 59,3 kilómetros y unen a la capital del municipio con otros núcleos de su entorno. Por último las 88 de acceso a fincas; 69,2 km que unen la red anterior de caminos con edificaciones rurales y lugares del término municipal.

Muchos de estos son caminos muy antiguos,  algunos tienen su origen en la prehistoria, como las rutas de Sevilla y Córdoba a Carteia y Estrecho de Gibraltar. En el caso de Jimena de la Frontera, debido a su posición estratégica, esta red de caminos es especialmente relevante, constituyendo un reflejo de la historia, de las formas de vida y los sistemas de comunicación. Todo ello en un municipio que en buena parte está ocupado por un rico entorno natural.

Este estudio permite afrontar nuevos retos en los  próximos tiempos: la aprobación provisional del inventario, su inclusión en el  registro de la propiedad, las tareas de deslinde y amojonamiento y la puesta en marcha de un plan de mejora de caminos públicos: limpieza, pavimentaciones, señalizaciones, puesta en valor  cultural, paisajística y turística o acciones de repoblación vegetal. El inventario se ha ejecutado en colaboración con el área de Desarrollo, Innovación y Cooperación Local.
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4 comentarios:

Anónimo dijo...

Que va a pasar con las Cañadas ??

Anónimo dijo...

Y los caminos que están ocupados por viviendas, se derribaran ??

Anónimo dijo...

Fran: Dale las gracias a Pascual. Te has encontrado con una gran foto gracias al trabajo anterior. De bien nacidos es ser agradecidos

Anónimo dijo...

Pena dan los temerosos dos primeros comentarios, realizados seguramente por clase trabajadora que tienen su vivienda desde hace mucho tiempo en terrenos de la antigua Cañada Real. Y pena dan no sólo por el miedo que el pobre tiene al desconocimiento y al poder del todopoderoso, que son los que realmente debieran temer, por el apoderamiento (tras el uso y usufructo permitido) y las ventas posteriores de terreno público con el mirar para otro lado de quienes lo permitieron y debieran de haberlo prohibido, pero claro, como eran terratenientes había que hacer vista gorda. Ahora si les meten manos a los que compraron de buena fe para tener una vivienda digna, convirtiéndolas con ese proceder en viviendas indignas por supuesta usurpación. ¡Pues no lo es!, desde la vista popular por muchas circunstancias, siendo, en el caso de San Pablo, la más importante, el cambio y alteración de los mojones en beneficio de las fincas de poderosos colindantes, siguiendo la tradición misma de pastoreo, y/o usurpación desde el mismo origen de las mismas allá por los tiempos de Alfonso X El Sabio. Así que no es nuevo el problema, y en San Pablo no iba a ser menos, teniendose en cuenta que por los años 60 y posteriores muchos pobres se hacían con pequeñas parcelitas para hacer sus chozas en los terrenos del descansadero (el trazado real de la Cañada era más abajo) y no por donde nos la quieren colocar, justificandose en fotografías aéreas posteriores, debido a que antes la fotografía no existía y los croquis eran perfectamente manipulables en beneficio de los mismos: poderosos terratenientes.